Falta de presión, color turbio en el agua, sabores desagradables. Estos son algunos problemas que puede causar el óxido en las tubería, sobre todo si estas son de hierro y tienen más de veinte años.
No nos vamos a parar a explicar el motivo de la oxidación, ya que ese es otro tema que puede consultar por la web si esta interesado.
Este es el estado que suele presentar las tuberías de hierro a causa de la oxidación. Un problema cada vez más presente en
comunidades de vecinos, provocando perforaciones por las que el agua evidentemente acaba saliendo. Estas perforaciones o poros, son el principal problema, junto con los sedimentos que se crean en el interior de los tubos, que al desprenderse, son el principal causante de los atascos en los filtros o aireadores, antecedentes por los cuales se detecta la oxidación de las tuberias. Grifos que no cierran bien o una caída de la presión en determinados lugares de la casa, también son pistas para detectar que nuestras tuberías tienen un exceso de óxido en su interior.
La solución a estos problemas pasa necesariamente por sustituir las conducciones por materiales nuevos, sobre todo en los lugares en los que los poros ya han comenzado a producir humedades en paredes, generalmente en las escaleras de los inmuebles, ya que es por aquí por donde en la mayoría de comunidades, pasan los cañerías que distribuyen el agua a cada hogar, sobre todo en las edificaciones de mas de 20 años.
Hoy en día existen materiales tal como el polietileno, polibutileno o polipropileno, materiales que por su composición, tienen mayor durabilidad que el cobre, y no digamos que el hierro, además de ser mucho más sencillo de manipular que tuberias roscadas o soldadas, lográndose que la sustitución de estos no supongan un trastorno para los propietarios pudiendo realizar la instalación en muy poco tiempo.
No nos vamos a parar a explicar el motivo de la oxidación, ya que ese es otro tema que puede consultar por la web si esta interesado.
Este es el estado que suele presentar las tuberías de hierro a causa de la oxidación. Un problema cada vez más presente en
comunidades de vecinos, provocando perforaciones por las que el agua evidentemente acaba saliendo. Estas perforaciones o poros, son el principal problema, junto con los sedimentos que se crean en el interior de los tubos, que al desprenderse, son el principal causante de los atascos en los filtros o aireadores, antecedentes por los cuales se detecta la oxidación de las tuberias. Grifos que no cierran bien o una caída de la presión en determinados lugares de la casa, también son pistas para detectar que nuestras tuberías tienen un exceso de óxido en su interior.La solución a estos problemas pasa necesariamente por sustituir las conducciones por materiales nuevos, sobre todo en los lugares en los que los poros ya han comenzado a producir humedades en paredes, generalmente en las escaleras de los inmuebles, ya que es por aquí por donde en la mayoría de comunidades, pasan los cañerías que distribuyen el agua a cada hogar, sobre todo en las edificaciones de mas de 20 años.
Hoy en día existen materiales tal como el polietileno, polibutileno o polipropileno, materiales que por su composición, tienen mayor durabilidad que el cobre, y no digamos que el hierro, además de ser mucho más sencillo de manipular que tuberias roscadas o soldadas, lográndose que la sustitución de estos no supongan un trastorno para los propietarios pudiendo realizar la instalación en muy poco tiempo.
